David FitzGerald

Claudia Masferrer conversa con David FitzGerald (University of California, San Diego) sobre cómo México se convirtió en el cuarto país más grande en materia de asilo y en el muro sur para Estados Unidos.






Escúchalo en tu plataforma favorita

plataforma plataforma plataforma plataforma plataforma


Lecciones sobre asilo y refugio para México

Estados Unidos tiene una larga historia de externalización de sus fronteras. Hay precedentes y novedades en la forma en que México funciona como un estado buffer o “tapón”. Durante la década de 1980, cuando las guerras civiles asolaron Centroamérica, muchos salvadoreños y guatemaltecos viajaron a través de México hacia Estados Unidos. Bajo la presión de Estados Unidos, el gobierno mexicano puso en marcha varias medidas destinadas a disuadir esta migración. Estas medidas incluían una política restrictiva de visas, restricciones de viaje a los centroamericanos en el norte de México, campamentos de refugiados en el sur de México, la aceptación de facto de devoluciones “en caliente” de Estados Unidos, la devolución en cadena, y la realización de repatriaciones de nacionales de terceros países con financiamiento de Estados Unidos.

Hoy en día hay muchas similitudes. El gobierno mexicano ha intensificado una tradición de deportaciones a gran escala. Entre 1989 y 2017 hubo 3.5 millones de deportaciones de centroamericanos. El nivel de aprehensiones alcanzó recientemente las 120,000 al mes. Sin embargo, en comparación con la década de 1980, en la actualidad, lo diferente radica en la escala y la diversificación de los orígenes fuera de Mesoamérica. Estados Unidos se convirtió en el principal destino en el mundo para los solicitantes de asilo, cuyo punto de entrada principal es la frontera entre Estados Unidos y México. De los “encuentros” estadounidenses en la frontera terrestre del suroeste, una categoría que incluye detenciones, denegaciones de entrada en los puntos de cruce fronterizo, y expulsiones bajo el Título 42, solo el 28% son mexicanos. Más de la mitad de los “encuentros” son de nacionales de países fuera de Mesoamérica.

México se conviritó en el cuarto país del mundo con más solicitantes de asilo. Sin embargo, la tasa de ausencias a las citas de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR) sigue siendo alta. La tasa de “no presentación” osciló entre el 58% y el 77% durante la primera parte de 2023. Estados Unidos es el destino previsto para la mayoría de los migrantes, aunque muchos se han asentando de forma más o menos permanente en México. Cabe señalar que Estados Unidos financia tres cuartas partes del presupuesto del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en México.

Lee más

Arar, R. y D. FitzGerald (2023). The Refugee System: A Sociological Approach, Cambridge: Polity Press.

FitzGerald, D. (2019). Refuge Beyond Reach: How Rich Democracies Repel Asylum Seekers, Nueva York: Oxford University Press.

FitzGerald, D. y A. Palomo-Contreras (2008). “México entre el sur y el norte”, Cuadernos CEMCA, Serie Antropología, núm. 3, Centro de Estudios Mexicanos y Centroamericanos, pp. 16-31.

FitzGerald, D. (2014). Nación de emigrantes: cómo maneja México su migración, Tijuana: El Colegio de la Frontera Norte.

FitzGerald, D. y D. Cook-Martín (2015). “Eligir a la población: leyes de inmigración y racismo en el continente americano,” en P. Yankelevich (ed.), Inmigración y racismo: contribuciones a la historia de los extranjeros en México, Ciudad de México: Colegio de México.

David FitzGerald

Retrato


David FitzGerald es profesor titular de la Cátedra Theodore E. Gildred de Relaciones entre Estados Unidos, también es profesor e investigador de sociología en la Universidad de California San Diego. Su investigación analiza las políticas que regulan la migración y el asilo en países de origen, tránsito y destino.